Para hacer frente al incremento del gasto público provocado por la política social del gobierno sin aumentar los impuestos, el gobierno alemán se empezó a imprimir cada vez más papel-moneda, aferrándose al error de que la devaluación de la moneda se debía, no a la expansión monetaria y crediticia, sino a la desfavorable balanza de pagos. Hasta enero de 1922, la moneda alemana se devaluó hasta 36,7 marcos por dólar, momento en que la inflación tomó proporciones anormales. A principios de 1922 los precios aumentaron aproximadamente un 70%. En diciembre de 1922 el dólar ya alcanzó el promedio de 7.592 marcos . Para entonces la mayoría de la gente había perdido todos sus ahorros. La Hacienda se hundió, y el gobierno, cada vez con menos ingresos, se financió imprimiendo aún más billetes. El dólar pasó de 17.972 marcos a 350.000 en julio, 1 millón a comienzos de agosto, 4 millones a mediados de mes, y 160 millones a finales de septiembre. El derrumbe del marco fue tan absoluto que dejó de funcionar como valor de cambio, con el consiguiente colapso de la economía alemana.
Tal fue el colapso , que era imposible imprimir la cantidad de moneda necesaria para la ocasión por lo que se empezó a imprimir dinero descontrolada mente en cualquier pedazo de papel , naipes, cartón ,etc.
1 comentario:
estos alemanes... jajaja
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